Partido que se prometía difícil el jugado el sábado por la tarde en Cieza, y así fue a la postre.
El equipo caravaqueño está muy necesitado de victorias y por ello vino con toda la artillería, y sin posibilidad de rotaciones ya que vino solo con nueve jugadores, lo que hace que los jugadores elegidos disfruten de mas minutos en la cancha, y los jugadores menos elegidos ...
Empezó el equipo visitante con un poderoso primer cuarto endosando a los ciezanos un parcial de 8 a 18. Malas elecciones en ataque y una defensa poco fiable propiciaron esta situación.
Sin embargo en el segundo cuarto supimos dar la vuelta al marcador y con una presión que dio sus frutos y un ataque fluido y certero endosamos un parcial de 20 a 8, lo que nos colocaba 28 a 25.
El tercer cuarto fue raro, los dos equipos pusieron todo el empeño de mundo en llevarse el partido, y uno de los árbitros también. todas nuestras acciones acababan en falta, en ocasiones las de ataque también, mientras dos de nuestros jugadores rodaban por el suelo, uno con un golpe en la nariz, fruto de un codazo que el colegiado explicó al jugador caravaqueño que eso era falta (pero no la pitó) y otro con el labio partido. 8 - 23 en este cuarto.
El último cuarto fue un mero trámite. El equipo local viendo desfilar al banquillo, expulsados por faltas, a sus jugadores, y el equipo visitante haciendo correr el reloj para rematar un partido. Un partido que se prometía difícil, pero que, habiendo ganado o perdido hubiera sido un partido vibrante, acabó siendo un vibrante concierto de pito.
Al final 47 - 60, una derrota que no supone nada para las aspiraciones de permanecer en la cabeza de la tabla ya que distamos dos victorias del cuarto clasificado y solo una del segundo puesto.
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